A tan solo tres semanas de empezar mi último curso en la escuela en la que llevo mas de 14 años, muchas ideas vienen a mi cabeza. Será un año difícil, no solo por el esfuerzo, si no, por dejar atrás a tanta gente con la que he compartido durante tantos años el día a día. Ademas hay una cuestión que me aterra. Durante mucho tiempo he sabido lo que mi futuro deparaba, no lo sabia todo, pero si sabia que durante un tiempo estaría en un lugar, haciendo unas cosas y con gente que conocía.
Pensar que no se donde estaré el año que viene por estas fechas me emociona pero me da vértigo a la vez...
Todos necesitamos un cambio de aires de vez en cuando, y desde luego ha llegado el momento. Éste año es decisivo para empezar a dirigir mi vida hacia el futuro que yo quiero. La vida no es previsible, siempre nos deparará sorpresas pero hay que estar preparado para ellas.
¿No es emocionante pensar que de aqui un año de abre un abanico enorme de posibilidades en las que podré escoger?
Saldremos de esa burbuja de protecciones, aun estaremos a unos años de la vida real, pero todo cambiará sin lugar a dudas.
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